La
pasión por la obra literaria de Guido Buffo nos llevó a soñar con recrear en
Villa Leonor la figura del Menhir quien en 1940 publica el libro
“ El Menhir de la Figura coronada
del Mollar de Tafí”, dedicado al artista anónimo que lo creó, a su hija y a su esposa, quien le
inspiró un profundo interés por las culturas americanas, destacando su importancia
arqueológica y cultural.
Los
Menhires de Tafí del Valle fueron desplazados de su ubicación original, afectando
su integridad y mientras este se
encontraba en un parque de la ciudad de Tucumán. Guido comenzó a realizar
un estudio iconográfico basado en fotografías y la interacción de la
luz con la piedra.
En el año 2019, se realizaba en el Museo de la Mujer en Córdoba y paralelo al VIII Congreso Internacional de la Lengua Española, un homenaje a Leonor Allende, como primera periodista cordobesa y escritora ilustre.
Se
presentó en una de las charlas como oyente Noelia Elina Martinez Degregorio con
la inquietud de participar junto a la Fundación en un proyecto de escultura con
su compañero José María Said Nisi.
Hacía
un tiempo que Gustavo Diaz había tenido un sueño de re crear el Menhir y
parecía que este comenzaba a materializarse: durante muchos años había en el
Parque Estudiantil de Montaña un Monolito, pero fue en este tiempo, que se ideó erigir un Menhir
interpretado por Buffo en Villa Leonor como tributo a las investigaciones
arqueológicas de él en Argentina.
Así
comienza a darse forma a este proyecto mediante
vínculos que aman este Legado. A pesar
de las dificultades financieras y logísticas, el sueño persistió y se compartió
con Karina Rodriguez, quien tenía experiencia en la realización de proyectos
culturales.
Eventualmente,
la escultora Noelia Elina Martinez Degregorio y el escultor José María Said
Nisi se unieron, lo que llevó a una serie de eventos que fortalecieron la
colaboración y el compromiso con el proyecto, demostrando cómo los sueños y el
lenguaje pueden influir en la creación de la realidad
Con
la colaboración de Nicolás Viñas, geólogo, se identifica una tonalita adecuada
para la escultura. La comunidad se une en este esfuerzo, y Juan Carlos, un
transportista personalmente tocado por la historia, ofrece sus servicios para
el traslado de la piedra. Este gesto solidario refleja el espíritu de la
iniciativa, uniendo a las personas en la conmemoración y la inspiración
artística.
Los
Planos de base fueron realizados por los arquitectos Ruben Wellan y Ricardo de Vertiz, miembros del consejo de la
Fundación en ese entonces.
Fue necesario
construir una base para sostenerlo; Lalo, junto a su esposa María José,
responde al llamado donando el cemento, hierro, arena y piedra necesaria.
Vannia
y
Edgardo…Colaboraron con el dinero para abonar la mano de obra del
albañil que preparó la base.
La
piedra, imponente en su estatura y peso, esperó a ser activada durante un
evento celestial: una lluvia de estrellas seguida de un eclipse, coincidiendo
con el sesenta aniversario del fallecimiento de Guido Buffo.
El
Menhir fue colocado
como homenaje de los 60 años de
fallecimiento de Guido Buffo (13/12/1960
- 13/12 /2020) el 13 de diciembre del año 2020.
Durante
dos años se fueron tejiendo lazos y un intercambio de sincronizaciones revelando cómo visiones y sueños proféticos
han influido en la búsqueda de personas para el futuro de la fundación y en su
propio proceso evolutivo.
La
figura del Arcángel Miguel y la Virgen de Guadalupe se entrelazan en su
narrativa, proporcionando guía y confirmación en su misión.
Esta
historia, tejida con la colaboración y el apoyo de una comunidad unida, refleja
la dedicación a un objetivo mayor: la creación de un legado para las futuras
generaciones, un legado de energía, espiritualidad y conexión.
Les compartimos los enlaces para quienes quieran
revivir este proceso y los invitamos a leer el nuevo post que
se titula “Un Faro
para la Humanidad”.
Texto: Eliane Buchweis